Nadie puede persuadir a otro para que cambie. Cada uno de nosotros tiene una puerta de cambio que solo se abre desde adentro. No podemos abrir la puerta de otro, ya sea por argumento o apelación emocional
— Marilyn Ferguson
Si buscas la frase «cómo motivarse» en Google verás un listado de «autocompletar» con variaciones de la misma.
También verás que hay muchas personas que tienen problemas para lograrlo en distintos ámbitos:
- para estudiar
- para escribir
- para hacer ejercicio
- para bajar de peso
- etc.
Quizás eres una de ésas personas y yo pueda ayudarte a resolver esta incógnita sobre la ciencia detrás de cómo motivarnos.
¿Qué necesitamos para motivarnos?
Es natural pensar que necesitamos una recompensa para motivarnos. Después de todo, así hemos sido criados: «si haces la tarea, te doy un chocolate«, «si te portas bien, te regalo una consola de videojuego«.
Pero las cosas no son tan simples.
El autor Dan Pink nos explica que las recompensas pueden funcionar hasta cierto punto.
Aunque el vídeo habla del ambiente laboral, me parece que aplicar perfectamente en lo personal.
En el siguiente vídeo animado el autor nos explica que no es gracias al tamaño de la recompensa que un trabajo se hace mejor o peor.
De hecho, llega un punto en el que el tamaño de la recompensa deja de ser importante.
Entonces, si la recompensa no es suficiente ¿cuál es la mejor forma de motivarnos?
El autor lo resume con tres ingredientes. Si no cumples con alguna de éstas claves en lo que sea que te quieres motivar, entonces intenta resolverlo primero.
- Autonomía
- Maestría
- Propósito
Autonomía
Decidir qué, cómo, y cuándo hacer una cosa nos da la sensación de control sobre nuestras propias vida.
Es algo que suele brindar gran satisfacción personal y que motiva más que estar bajo las instrucciones de un tercero.
Si trabajas por tu cuenta, probablemente te resulte más fácil.
Si lo que buscas depende de un tercero, la recomendación es pedir mayor autonomía.
Maestría
La «maestría» es aquello que ganamos mientras aprendemos.
Son las ganas de hacernos mejor en algo bien sea por competitividad o por intelecto.
La maestría suele ser divertida y un poco «dolorosa».
Está muy conectada con la autonomía: sin ella te resultará difícil tomar la decisión de trabajar o hacer aquello que te motiva.
Si alguna vez te aburriste de un trabajo, sabes cómo se siente cuando ya no tienes nada que aprender.
Pro-tip: te recomiendo pasar de operador a pensador, porque alguien que piensa nunca se aburre.
Propósito
Sabernos parte de algo importante suele ser un gran motivador.
Todos queremos contribuir de alguna forma con nuestro entorno.
Supongo que es así como cientos de miles de personas trabajan en wikipedia gratuitamente (17 mil 782 al momento de escribir esta entrada).
Si no tienes un propósito o objetivo, será difícil motivarte. Te recomiendo buscar uno =)
¿Hábitos o motivaciones?
La motivación es lo que te ayuda a comenzar. El hábito es lo que te mantiene en marcha.
Jim Ryun
Muchos confundimos los términos. Suelen estar estrechamente relacionados, pero son diferentes.
Las motivaciones son fáciles, y suelen tener un «premio» intrínseco que perseguir.
Una motivación es el por qué de realizar una acción: trabajo porque así gano dinero que luego puedo usar para comprar cosas.
Los hábitos son difíciles.
Un hábito es una acción que realizamos periódicamente: todas las noches toco la guitarra.
Cuando estaba en bachillerato, estuve cerca de no aprobar matemáticas.
Estaba tan desesperado que desarrollé el hábito de estudiar y hacer ejercicios matemáticos durante 2 horas diarias después de regresar de la escuela. Incluidos feriados y fines de semana.
Ese capítulo de mi vida me demostró que la autonomía, la maestría y el propósito eran importantes para desarrollar nuevos hábitos.
La motivación era pasar el año junto con todos mis amigos de la sección.
El hábito fue estudiar diariamente.
¿Por qué no puedo motivarme?
El conocimiento es el paradigma teórico, el qué hacer y el por qué. La habilidad es cómo hacerlo. Y el deseo es la motivación, el querer hacer. Para hacer de algo un hábito en nuestras vidas, debemos tener los tres.
Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva
Si tu motivación no es suficiente para mantener un hábito, algo está fallando.
En vez de frustrarte, sería más útil revisar qué está pasando.
Para alguien que comienza a asistir a un gimnasio por primera vez, la motivación puede ser «rebajar 10 kilos».
Pero será difícil asistir a un gym como primerizo si no se tienen ciertos conocimientos sobre el uso de los aparatos, orientación inicial y/o un plan de entrenamiento.
Muchas veces hay agobio al comenzar una o varias actividades en simultáneo.
En lo personal, cuando quiero motivarme y tengo los recursos adecuados puedo avanzar fácilmente. Si estoy bloqueado, lo mejor es buscar ayuda.
Dominando hábitos
La verdad es que el truco detrás de cualquier motivación está en los hábitos.
Por eso, lo primero que te recomiendo es comprar un libro sobre cómo funcionan los hábitos.
Hábitos Atómicos de James Clear es uno de los mejores que hay en el área, y además de data reciente.
Lo segundo es buscar ayuda en el área en el que quieres crear ese nuevo hábito.
Tener una voz que te ayuda en el camino, bien sea con conocimiento o con estímulo, es vital para el proceso.
Si no consigues motivarte después de mucho intentarlo, es probable que no lo quieras tanto.
Como dice James Clear en su libro: es mejor que tengas esa conversación contigo mismo.
La foto la tomé un bonito día de invierno en la región Lombarda de Italia, más precisamente en Varenna.
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